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Se suponía que Juan Soto sería el que marcaría la diferencia, el que impulsaría a los Yankees de Nueva York de nuevo a la cima.
Están a un paso.
Soto conectó un jonrón de tres carreras con dos outs en la décima entrada y los Yankees avanzaron a su 41ra Serie Mundial, y primera en 15 años, al vencer a los Guardianes de Cleveland 5-2 en el Juego 5 de la Serie de Campeonato de la Liga Americana el sábado por la noche.
La marca más grande del béisbol regresará al escenario principal en octubre.
Soto, quien fue adquirido en un intercambio de siete jugadores desde San Diego en diciembre, empujó a los Bombarderos del Bronx a posición con un gran swing.
Por eso vino, por este momento y por tantos más.
“Obviamente, tuvo una temporada asombrosa en términos estadísticos, pero en los momentos más importantes, eso es lo que hace”, dijo el mánager de los Yankees, Aaron Boone. “Y no hay que darlo por sentado”.
Los Yankees, que no llegaron a los playoffs el año pasado, intentarán ganar su 28º título contra los Mets de Nueva York o los Dodgers de Los Ángeles. El sexto juego de la Serie de Campeonato de la Liga Nacional se jugará el domingo en el Dodger Stadium.
Con el marcador empatado 2-2 en el tercer juego apretado consecutivo en tres noches en Progressive Field, Austin Wells caminó con un out en la décima y Alex Verdugo le siguió con un roletazo al segunda base de los Guardianes, Andrés Giménez, cuyo suave lanzamiento a la base fue dejado caer por el campocorto novato Brayan Rocchio para un error.
Hunter Gaddis ponchó a Gleyber Torres y puso a Soto en cuenta de 1-2 antes de que el elegante jardinero de Nueva York, que bateó cuatro fouls y envió un tiro imponente por encima de la pared del centro.
“Un turno al bate inolvidable”, dijo Boone.
Soto bailó por la línea de primera base y se detuvo para celebrar con sus compañeros de equipo antes de recorrer las bases.
«Me decía a mí mismo: ‘Estás encima de ese tipo. Estás encima de ese tipo. No tiene nada'», dijo Soto, quien, junto con Boone, fue el único jugador de Nueva York en conectar jonrones en una victoria en entradas extras que aseguró la serie.
Luke Weaver consiguió los últimos tres outs con Lane Thomas volando hacia el jardín derecho para el último, que fue atrapado por Soto, naturalmente.
Cuando llegó a Nueva York, algunos se preguntaban cómo encajaría. ¿Podría soportar la atención que le producía jugar en la Gran Manzana, donde cada partido se analiza como si fuera una temporada? ¿Podría coexistir con Aaron Judge?
Soto no sólo ha encajado, sino que ha liderado el cambio.
“Es una persona a la que le gusta estar cerca”, dijo Boone. “Traes a un jugador superestrella, ¿cómo se verá? ¿Cómo será? Es uno más del grupo. Ha sido gratificante ver eso, hombre, no tengo que esforzarme para preocuparme por él. Es bueno. Siento que he desarrollado una gran relación con él, pero es uno más del grupo”.
Soto, de 25 años, es elegible para convertirse en agente libre este invierno y los fanáticos de los Yankees corearon “¡Recontraten a Soto!” durante las festividades posteriores al juego. Se espera que obtenga un contrato de más de 600 millones de dólares y su heroísmo en el Juego 5 puede haber elevado su precio.
“Creo que deberíamos volver a fichar a Soto”, dijo el tercera base Jazz Chisolm Jr. “¡700 millones de dólares, oferta final!”
Giancarlo Stanton conectó un jonrón de dos carreras y fue nombrado el Jugador Más Valioso de la Serie de Campeonato de la Liga Americana, mientras los Yankees se deshicieron de los Guardianes en cinco juegos. No fue fácil.
Nueva York ganó los dos primeros partidos en el Yankee Stadium sin demasiada fanfarria ni dramatismo. Sin embargo, en Cleveland la historia fue diferente, ya que los tres partidos en el Progressive Field fueron muy disputados.
Los Guardianes se recuperaron para ganar el Juego 3 con dos jonrones de dos carreras en sus últimos dos turnos al bate, y los Yankees aguantaron para ganar el Juego 4 después de desperdiciar una ventaja de cuatro carreras.
“Fue una montaña rusa y pudimos seguir luchando”, dijo Stanton. “Sabemos que hay mucho más trabajo por hacer y que a partir de ahora todo es cuesta arriba, pero tenemos que hacerlo”.
Cleveland simplemente no tuvo suficiente y una sorprendente temporada bajo el mando de Stephen Vogt, quien estaba en su primer año como mánager, terminó a las puertas de la Serie Mundial. La franquicia sigue sin ganar un título desde 1948, la sequía más larga del béisbol en la actualidad.
“Solo hay un equipo que puede ganar el último partido del año y, por desgracia, no seremos nosotros”, dijo Vogt. “Pero hemos logrado mucho como grupo. Hemos mejorado. Hemos trabajado muy duro. No podría estar más orgulloso de este grupo. Simplemente no hemos llegado tan lejos como queríamos”.
Por: Noticonexion/AP
