SANTO DOMINGO. Érase una vez en la que un inquieto productor y director dominicano llamado Guillermo Cordero se empeñó en realizar una obra teatral que sirviera para empoderar a sus compatriotas sobre las relaciones interpersonales, la fortaleza de la mujer y el crecimiento personal, pero de una forma divertida, donde las actuaciones y el libreto sean tan buenos que el público no pudiera diferenciar lo genial de lo absurdo.
Para esto, necesitaba cómplices lo suficientemente experimentadas y comprometidas con el proyecto, y que de esa forma el resultado fuese el esperado. Catorce presentaciones a casa llena y el reconocimiento de la crítica especializada tanto para él como para las intérpretes.
Es así como empieza esta historia de un éxito teatral, donde Cordero se unió a las legendarias actrices Carlota Carretero, María Castillo y Karina Noble, quienes confiaron en el proyecto de forma inmediata.
Luego de casi dos años y tras una etapa en el Teatro Nacional con funciones llenas cada día, la obra “Colorín colorado… este cuento sí ha cambiado”, está de regreso. Esta vez en un escenario más relajado, la sala The Alley de Downtow Center, a partir del 8 de marzo, desde las 8:30 de la noche.
En una conversación con DL Cordero manifestó su emoción de regresar con esta puesta en escena.
“Luego de una etapa de un éxito pocas veces visto en la sala Ravelo del teatro Nacional, regresamos con esta maravillosa obra teatral. Desde que la presentamos en el 2017, mucha gente nos preguntó cuándo la repondríamos. Finalmente pudimos coordinar la agenda de las tres para que el montaje se materializara y por fin logramos que así sea”, manifestó.
Y continuó: “En esta versión que va a ser un poco más relajada en el sentido de que no es lo mismo estar en un teatro per se que dentro de un ambiente donde se puede estar incluso consumiendo tragos, habrá un mayor contacto todavía con la gente que acuda”.
Para Cordero el éxito del montaje se debió tanto en la historia en sí como en la unión del elenco.
“Que se unieran estos cuatro jinetes del espectáculo local hizo que se generara una expectativa interesante a parte de la imagen, vestuario, maquillaje, la actitud de las actrices en los promocionales, además ellas tenían muchísimos años que no actuaban juntas, y en el mundo teatrero querían ver que iba a ser un director novato como yo con estos tres grandes de la actuación”, aseguró.
Sobre la trama señaló: “De esa sátira hay una gran verdad envuelta, porque en cada monólogo interpretado por las actrices, así como el prólogo y el desenlace hay una realidad oculta, aparenta ser una comedia ligera, pero el fondo es mostrar como el ser humano tiene que lidiar con las relaciones. Hay cosas que son tan simples, pero dichas de una forma tan jocosa que la gente tiene que reconocer que es así, y se ríen mucho de lo absurdo”.
“El guion tuvo dos etapas, la primera lo que yo quería hacer con la idea inicial enfocada en la figura del coach motivacional, donde le di forma junto a Madeline Luna, y luego con Noel Ventura para poner un poco más picante algunos de los momentos, finalmente con las actrices comenzamos a quitar y agregar cosas que terminaron en una historia sin desperdicios”, detalló Cordero, y adelantó que esta semana iniciarán los ensayos.
Que una obra dure poco tiempo en escena se debe en gran medida a la “falta de cultura teatral preponderante en el país. No hay cultura de hacer una obra por tres o cuatro meses, hay que parar y después volver, porque no es tanto el público que gusta”, se manifestó el productor del teatro local.
Sobre su ausencia de la producción de los Soberano dijo desconocer las razones, pues señaló que fue el único que quedó fuera del equipo del año pasado. “Hay que preguntárselo a ellos Pero por resultados no fue”, aseguró Cordero.
Por: Jeury Frías