Habitantes del sector La Placeta, en el kilómetro 13 de Haina, en Santo Domingo Oeste, llevan años usando una parte de la orilla norte del río Haina como vertedero improvisado, en donde depositan todo tipo de desperdicios sin tomar en cuenta el daño que le provocan al medioambiente y a la misma comunidad.
Una enorme montaña de basura, escombros, animales muertos, ropas viejas, muebles y colchones podridos son solo parte de los desperdicios que están en la orilla o dentro del agua del citado cauce.
La Placeta enfrenta una grave crisis ambiental por el uso del río Haina como vertedero improvisado

El mal olor, los mosquitos, la cantidad de moscas y ratones que se sienten y ven en el lugar son evidencia del alto grado de contaminación que hay en el lugar.
“Este problema no es nuevo y el actual síndico, Francisco Peña, sabe de él porque vino en la campaña y prometió solucionarlo y además nos prometió que nos construiría una cancha que necesitamos en este sector. Y ahora lo estamos esperando”, según Gustavo de la Rosa Cuevas residente del lugar.
Según algunos vecinos del área esta práctica, no ha generado una grave crisis medioambiental, en todo el sector, porque cuando el río se inunda se lleva toda la basura que le queda próximo. Además de que cuando hay muchos desperdicios acumulados las personas los tiran directo al agua.
Los residentes denuncian la falta de acción del ayuntamiento ante la contaminación y plagas generadas
Esta práctica fue comprobada ya que en apenas 15 minutos que duró un equipo de El Nacional haciendo el trabajo de campo para este reportaje, al menos 5 niños y 6 adultos se presentaron al lugar a tirar residuos al agua en bolsas plásticas, en cubetas y sacos.

La situación en La Placeta es alarmante, ya que río, que es vital para el ecosistema local, se encuentra visiblemente impactado por la acumulación de desechos.
Los vecinos reportan que la contaminación es una constante, y que la falta de un sistema de recolección de basura eficiente o de un vertedero adecuado ha empujado a la comunidad a utilizar el río como su principal destino para los desperdicios.
La situación perjudica la salud pública y el ecosistema local, demandando urgente intervención gubernamental
«Llevamos varios años con este problema. El río está lleno de basura. En épocas de lluvia, todo se desborda y el olor es insoportable. Los niños no pueden jugar cerca y tenemos plagas de ratones y mosquitos por todos lados. Hemos hablado con el ayuntamiento en varias ocasiones, pero no vemos soluciones», comenta Ana María Pimentel, residente de La Placeta.
La contaminación del río Haina no solo afecta la estética del lugar, sino que tiene serias implicaciones para la salud pública y el medio ambiente. La degradación del agua impacta directamente la flora y fauna acuática, y los lixiviados de la basura pueden infiltrarse en el subsuelo, contaminando las aguas subterráneas.
A pesar de la magnitud del problema y las constantes quejas de los residentes, la comunidad de La Placeta señala una aparente indiferencia por parte de las autoridades municipales de Santo Domingo Oeste.
La Placeta del kilómetro 13 es un claro ejemplo de cómo la falta de planificación y la inacción de las autoridades pueden llevar a una catástrofe ambiental y social.
Esta empobrecida localidad formada por un laberinto de estrechas calles y callejones verticales clama por una respuesta, y espera que el ayuntamiento tome las medidas necesarias para solucionar el problema y garantizar un ambiente saludable para sus ciudadanos.
Por: Noticonexion/end