Las historias femeninas son mayoría a la hora de ser llevadas al teatro. Es algo que valoran y agradecen Karla Hatton y Niurka Mota, dos veteranas actrices que han trabajado juntas en muchas ocasiones en piezas teatrales y que tienen ahora la oportunidad de repetir.
Los temas con la mujer protagonista en los montajes escénicos es algo que ambas artistas lo entienden desde el punto de que ese género tiene más que decir. “La mujer es la que más denuncia, la que más siente, y ha abierto las puertas para decir cosas que antes no se atrevía porque era totalmente dependiente del hombre, porque la sociedad no se lo permitía”, explica Mota, quien ve esto como algo que forma parte de la liberación que ha tenido su género.
Junto a Hatton, quien aporta al tema que esto pasa en el teatro, pero no en el cine local, en el que las historias masculinas siguen reinando, y Geannina Rodríguez, protagonizan “Las alegres reverendas”, montaje que dirige la misma Mota.
Se trata de un montaje del que, según han explicado a Listín Diario, pretende únicamente que el público la pase bien. “Es jocoso, interactivo, ligero, no es un trabajo para romperte el alma haciendo análisis, la única función que tiene es divertir”, asegura la directora y actriz.
Pese al aspecto ligero que puede tener el café teatro, y del aspecto lúdico al que han hecho referencia las actrices, este también busca la reflexión del público. “Tiene un texto que es una crítica a varias cosas”, sostiene Hatton, mientras que Niurka abunda un poco más y explica que son denuncias en tono humorístico de gente que no ha tenido la oportunidad de vivir experiencias mundanas, por el hecho de haber elegido el camino de los votos religiosos. Y ese aspecto circunspecto de las monjas dicen que se aprovecha como filón gracioso.
El espacio en el que tendrán lugar las funciones de esta pieza es el bar Juan Lockward del Teatro Nacional Eduardo Brito, desde hoy y durante todo el fin de semana, a las 9:30 de la noche.