El 18 de enero, Bruno, uno de los perros rescatistas que entrenó Ravio Pérez, alias “La Rabia”, para la Defensa Civil, le salvó la vida a una de las jóvenes que estaba bajo los escombros del edificio que colapsó en La Vega el pasado 18 de enero.
En los últimos años, Ravio se desenvolvía entre lavar las jaulas, cuidar los perros, entrenarlos, participar en simulacros y aconsejar a los más jóvenes en la Defensa Civil, hasta que a mediados de noviembre de 2022, la doctora Rosa Matos, del Centro de Operaciones de Emergencias, le indicó estudios de rigor y lo que “La Rabia” creía era una gripe y malestar estomacal, resultó ser un cáncer en el páncreas con metástasis en el hígado y otros órganos.
Esa condición de salud evitó que pudiera presenciar la reciente actuación heroica protagonizada por Bruno. Falleció de cáncer el 21 de diciembre pasado. Sin embargo, el pastor belga malinois y otros perros de la Unidad K9 aún pueden olfatear las cenizas de Ravio, que fueron esparcidas en los pasillos de la perrera y en el tronco de un frondoso árbol contiguo a su jaula, como lo pidió a sus familiares al enterarse de su cercano fin.
Esta unidad está en la parte oeste de la Defensa Civil en los terrenos de la Plaza de la Salud.
Tal era su amor por los canes, que mientras rescatistas fueron trasladados a la zona este del país durante el paso del huracán Fiona, en septiembre pasado, Ravio ayudó a una perra llamada Taipán, también del K9, a parir a ocho crías, no se despegó de su lado toda la noche, cuando la tempestad le sumaba miedo al dolor que sentìa esta valiente rescatista de personas desaparecidas.
Por: Deyanira Polanco