El CEO de Meta advierte a Sam Altman sobre el mayor error en un mundo cambiante, y es el de no asumir riesgos, para poder evitar el estancamiento y aprovechar las oportunidades.
En un mundo donde la tecnología avanza a un ritmo imparable, quedarse quieto puede ser la peor decisión. Así lo advirtió Mark Zuckerberg en una entrevista en 2016 con Sam Altman, CEO de OpenAI, cuando afirmó que «el mayor riesgo es no tomar ninguno«.
En un entorno donde la automatización amenaza millones de empleos, la exploración espacial avanza rápidamente y la inteligencia artificial revoluciona industrias enteras, los que se resisten al cambio pueden quedar relegados.
«Cualquier decisión que tomes tiene ventajas y desventajas. Pero, en conjunto, si te quedas estancado y no haces esos cambios, creo que estás garantizado que fracasarás y no te pondrás al día», indicó Zuckerberg.
El dilema del riesgo y la inacción
La economía y la tecnología evolucionan constantemente. La inteligencia artificial, la computación cuántica y las energías renovables están reconfigurando sectores enteros, dejando atrás a quienes no se adaptan. Según estudios de McKinsey, hasta un 30% de las horas laborales podrían ser automatizadas en la próxima década.
Sin embargo, muchas empresas y profesionales temen el cambio por miedo a perder estabilidad. Zuckerberg insiste en que el inmovilismo es la verdadera garantía del fracaso. Esta filosofía no solo se aplica a negocios, sino también a inversores y emprendedores que buscan crecer en un entorno competitivo.

Tomar riesgos no significa actuar impulsivamente, sino identificar oportunidades y calcular los beneficios frente a las posibles pérdidas. Por eso, vamos a repasar algunos enfoques que pueden ayudar a gestionar los riesgos sin comprometer la estabilidad financiera o profesional.
Para empezar, el mercado cambia rápidamente y las industrias emergentes pueden ofrecer grandes oportunidades. Warren Buffett sugiere especializarse en un área concreta, pero también recomienda ampliar el conocimiento sobre nuevas oportunidades, según AOL.
Invertir tiempo en comprender sectores como la inteligencia artificial, la energía sostenible o el blockchain puede marcar la diferencia entre quedarse atrás o adelantarse al mercado. Empresas como Tesla, Nvidia o Meta han demostrado que apostar por tecnologías en auge puede traducirse en grandes beneficios.
También hay que tener en cuenta que toda decisión conlleva riesgos, pero la clave está en determinar si la posible recompensa justifica la exposición. Un emprendedor que lanza un nuevo producto puede perder tiempo y dinero si fracasa, pero si tiene éxito, podría asegurar ingresos pasivos durante años.
Del mismo modo, en el mundo de las inversiones, apostar por startups o criptomonedas puede conllevar riesgos, pero también puede generar rendimientos excepcionales si se eligen bien las oportunidades.
Mark Zuckerberg : How to Build the Future
Por otro lado, una de las mejores formas de asumir riesgos de forma controlada es diversificar las inversiones y proyectos. Por ejemplo, asignar un porcentaje pequeño del portafolio a activos volátiles como Bitcoin o acciones tecnológicas permite beneficiarse del crecimiento potencial sin comprometer toda la estabilidad financiera.
Empresas como BlackRock sugieren que una inversión del 2% en criptomonedas puede ser razonable, ya que, si fracasan, la pérdida es mínima, pero si tienen éxito, los beneficios pueden ser exponenciales.
La lección de la historia: adaptarse o desaparecer
La historia está llena de ejemplos de empresas y sectores que desaparecieron por no adaptarse al cambio. Kodak ignoró la revolución digital y Blockbuster no tomó en serio el streaming. En contraste, Amazon pasó de vender libros en línea a liderar la computación en la nube, y Apple reinventó su negocio con el iPhone.
Por este motivo, Zuckerberg advierte que, en un mundo de constante transformación, quedarse inmóvil no es una opción. Los profesionales, inversores y empresarios que abracen la incertidumbre y tomen decisiones calculadas tienen mayores probabilidades de éxito.
Para los inversores, las palabras del CEO de Meta resaltan una realidad incómoda, que ser demasiado conservador puede llevar al fracaso. Si bien es fácil enfocarse en el miedo, el verdadero riesgo está en dejar pasar oportunidades de crecimiento.
Por: Noticonexion